working cats

El programa “Working Cats” en Filadelfia, coloca gatos en fábricas y almacenes con problemas de roedores como alternativa a las empresas de control de plagas.

Se trata del equipo de control y cuidado de animales de Filadelfia, que decidió encontrar un lugar para aquellos gatos abandonados que no cumplían el perfil para adaptarse a la vida doméstica.

Cada vez más empresas contratan gatos. El programa Working Cats busca gatos inadaptados y con problemas de comportamiento en los refugios de animales, para acomodarlos en empresas como caza ratones. Los animales cuentan con un microchip, están vacunados y son gratis. El programa no sólo está ahorrando dinero a los negocios, está ayudando a salvar la vida de una mascota no deseada.

Se trata de gatos que estropearían el sofá, no usarían la caja de piedras y evitarían el trato con las personas, pero que sin embargo mantienen su instinto cazador. El sistema no sólo resulta útil como control biológico de plagas, sino que además consigue que estos gatos estén más receptivos al trato con las personas al trato con humanos. Según aseguran, el hecho de poder sentirse más cómodos en su medio más natural, mejora su actitud y su interacción con los humanos.

El caso es que se ha desarrollado un programa oficial en los que varias empresas han visto mejorar las plagas de ratas y ratones que sufrían. Por ejemplo la distribuidora de cerveza Bella Vista además de cerveza contaba con bolsas de patatas fritas en sus almacenes. Debido a la acción de los roedores se veían obligados a desechar unas 15 bolsas diarias. A pesar de los tratamientos de desratización realizados por empresas de control de plagas, el problema persistía. Fue entonces cuando adquirieron un de estos gatos, de comportamiento arisco con las personas. Según pasó el tiempo no sólo los roedores fueron desapareciendo, sino que además el gato se fue convirtiendo en una mascota dulce y juguetona.

Lo cierto es que aunque los gatos difícilmente pueden superar los tratamientos químicos para desratización, sí pueden ejercer un efecto disuasorio mayor. Ya contamos en un post anterior cómo en la bahía de Westminster los gatos habían hecho un trabajo formidable hasta que tuvieron que dejar paso a las empresas de control de plagas.

Lo cierto es que mientras los gatos en sí no supongan un problema en la vivienda o pabellón industrial, son un remedio eficaz contra las ratas. Es un método ecológico y se consigue controlar la plaga aunque sólo sea por la acción de ahuyentar a los roedores.