Para muchos ciudadanos la palomas son consideradas como ratas con alas no solo por el repelús que dan a algunas personas, sino porque son capaces de transmitir enfermedades mediante el contacto directo o a través de sus excrementos. Por suerte, las empresas de control de plagas y los ayuntamientos disponen de los recursos necesarios para su control. Aun así, en ocasiones la situación se agrava como ha pasado en Portugalete donde vecinos han alertado sobre la presencia de una plaga de palomas en esta localidad de Bizkaia.
En concreto, las calles Poeta Díez Gaviño y Julio Gutiérrez Lumbreras, en el centro del municipio, son las más zonas más afectadas.
A pesar de que el Consistorio realiza anualmente campañas de control de plagas de palomas, en las últimas semanas han sido varios los vecinos que han mostrado sus quejas a la administración local para que tome cartas en el asunto.
En declaraciones al diario El Correo, muchos ciudadanos se quejan de la inacción por parte de las autoridades que alegan que sólo actúan si hay un edificio público cerca. En consecuencia, los vecinos tienen que arreglárselas con trucos caseros como llenar balcones de CDs, bolsas de basura o de tiras de papel aluminio.
Control de plagas de palomas en Bizkaia
Para paliar esta situación, el consistorio dispone de cuatro jaulas donde se apresa a esta ave. Según declaraciones a este medio, las jaulas están instaladas en cuatro lugares estratégicos; concretamente en tres inmuebles públicos (Ayuntamiento, UNED y la residencia San Juan Bautista) y por último en un edificio privado en la calle Carlos VII. Este último caso tiene su peculiaridad ya que desde la institución local aseguran que se llegó a un acuerdo con la comunidad por “problemas de suciedad y ruidos”.
De hecho, fuentes municipales aseguraron al periódico que en 2023 hubo un total de 507 ejemplares capturados, evitando el nacimiento de 3.000 aves. De momento, este año se desconocen los datos, ya que no ha terminado todavía, pero fuentes municipales piensan que los datos serán parecidos. Por último, cabe destacar que los vecinos deberían notar el descenso de la población con la trampa colocada en el inmueble ubicado en la calle Carlos VII.
Las empresas de control de plagas no solo se dedican a realizar labores de desratización y fumigación de insectos, también están para controlar cualquier problema con esta ave. Los recursos como el uso de CD, bolsas de basura etc. son una herramienta que funciona a medias. Es un remedio que se puede calificar de eficaz durante un tiempo. Si se quiere erradicar la situación de manera constante, el instrumento más acorde es la contratación de profesionales.
Existen medios físicos (redes, sistemas eléctricos…) o medios químicos (pulverización de un líquido que evita que se posen) que son muy eficaces contra este pájaro. Lo único que se debe hacer es ponerse en contacto con una compañía de sanidad ambiental y contarles nuestra situación. Ellos sabrán actuar de la mejor manera, garantizando la solución al problema.