olor para control de plagasLa utilización de pesticidas en el control de plagas representa riesgos medioambientales que derivan en problemas para la salud de ciertas especies y de la propia humanidad. Es por ello que cada vez existe una legislación más exigente para el sector de empresas de control de plagas y especialmente sobre los productos biocidas a utilizar en el control de plagas, se trate o no se trate de profesionales del sector. Estas restricciones de pesticidas unidas a la proliferación de nuevas plagas por el cambio climático y el tránsito de mercancías y personas, lleva a la ciencia a abrir continuamente nuevas áreas de desarrollo e investigación de nuevos métodos para el control de plagas.

Control de plagas con sonidos y olores

Una de esas líneas para combatir plagas evitando el uso de pesticidas químicos es la utilización de feromonas, y en esa misma línea su mueve un reciente estudio de científicos italianos que han comprobado que ciertos sonidos y olores afectan de manera similar a las feromonas en algunos insectos. El estudio realizado por investigadores de la Fundación Edmund Mach  bajo el proyecto PURE de la Unión Europea de mostró que mediante sonidos y olores se podría incidir en el control de plagas afectando a la fase reproductiva de ciertas especies invasoras. El estudio se ha centrado en la polilla europea y la cigarra scaphoideus titanus, dos plagas que atacan a la uva y causan graves daños económicos a la industria del vino, consiguiendo modificar su comportamiento de apareamiento mediante olores y sonidos.

plaga nuecesOtro estudio similar se ha llevado a cabo más cerca de aquí, en Bizkaia. Un equipo de investigadores de la Universidad del País Vasco en colaboración con el  Servicio Central de Análisis de Bizkaia (SGIker) ha realizado un estudio para los Servicios de Investigación Agrícola del Departamento de Agricultura de Estados Unidos consistente en analizar los olores de las nueces de California. Se estimó realizar un estudio para determinar el por qué unas nueces resultaban atacadas por las plagas y otras no. Se consiguieron identificar 92 componentes aromáticos, encontrando que 9 de ellos eran comunes en las nueces atacadas por las plagas. Mediante la identificación de estos olores y cómo la plaga responde a ellos, se pretende conseguir controlar estas plagas sin necesidad de utilizar productos químicos dañinos para el medioambiente.

Así pues, los olores y sonidos se añaden a otros recursos que investiga la ciencia como el uso de feromonas, la utilización de otros insectos depredadores para controlar las plagas, la utilización de machos estériles, etc. todos ellos ligados a la necesidad de reducir las emisiones de pesticidas químicos, y también todos ellos con un gran estudio e investigación científica de trasfondo.