Entrenan a ratas para salvar a personas en terremotos

Siempre que sucede un desastre natural terremotos, corrimientos de tierras etc., se relaciona la figura de bomberos o personal de protección civil con perros de rescate. Ahora una organización sin ánimo de lucro APOPO se ha propuesto entrenar a ratas para salvar vidas en este tipo de situaciones en lugares donde los canes no pueden llegar.

Aunque una plaga de ratas es uno de los principales problemas que padecen las grandes ciudades, puede que con este tipo de labor las veamos de manera más amable.

Las empresas de control de plagas somos las primeras en que catalogamos a esta especie como un problema en viviendas, comunidades o locales comerciales. Gracias a unas labores de desratización conseguimos erradicar esta dificultad, que si no se pone remedio de forma rápida, la situación se puede multiplicar exponencialmente. De todas formas, a pesar de su mala fama, esta ONG ha conseguido darle la vuelta a la tortilla y que sean vistas de una forma más cordial.

¿Las ratas pueden ser beneficiosas?

Por ello, la ONG belga APOPO están haciendo que un animal que causa tanto repelús pueda ser un vital aliado ante diferentes desastres naturales. En concreto, esta asociación está entrenando a este roedor para que salven a personas que queden atrapadas en terremotos bajo los restos de edificios.

Las “ratas rescatadoras” van equipadas con “pequeñas mochilas” que llevan una cámara, micrófonos y un transmisor para hablar con los afectados. De momento, este estudio está realizando pruebas en Tanzania debido a las condiciones de precariedad que viven en este país africano.

De todas formas, esta no es la primera vez que se emplea este tipo de roedor en situaciones tan complicadas. Desde que APOPO descubrió que en la década de los 90 se utilizaban para la búsqueda de minas antipersona, no dudaron en darle otro uso. En un primer momento, se empleaba su olfato para guiar a los lugares donde se encontraba la mina. Se aprovechaba su tamaño y peso para no accionar el explosivo, y así, se podían desactivar.

Además de este tipo de servicio, la misma ONG aprovechaba su olfato para detectar una enfermedad tan frecuente como la tuberculosis, aunque el paciente tenga una carga bacteriana tan baja que no podría detectarse con un microscopio. De esta forma, se pueden salvar miles de vidas, gracias a unos animales que en el Viejo Continente tienen muy mala fama.

Aun así, las ratas que utiliza esta organización son diferentes a las que podemos ver en nuestras ciudades. De hecho, tienen un tamaño mayor y una esperanza de vida de 8 años por los 3 de la rata común.

Próximamente se sabrá más sobre este estudio y si verdaderamente estas ratas sirven para rescatar personas en terremotos. De momento, las empresas de control de plagas continuaremos realizando nuestra función y eliminando roedores en aquellos lugares donde tengan problemas. Apostamos por los tratamientos más avanzados, tomando medidas para impedir su reaparición.