Plaga de ratas, un problema a nivel global

Las plagas de ratas en la ciudades son un problema grave no solo por la mala imagen que dan a los vecinos y visitantes sino porque son vectores de enfermedades. Las empresas de control de plagas llevamos insistiendo años en la importancia de unas labores de prevención como la mejor herramienta para controlar la situación. Ahora diferentes expertos alertan de la expansión de esta especie por gran parte del planeta, aspecto que ha hecho encender todas las alarmas. ¿Estaremos preparados para una plaga de ratas a nivel mundial?

Ciudades como Nueva York, París o Londres están sufriendo la peor plaga en décadas. ¿La culpa? La pandemia que ha hecho que estos roedores amplíen sus fronteras en busca de alimento.

A esto debemos añadir que las compañías de sanidad ambiental no han conseguido realizar las labores de control y desratización necesarias para paliar este efecto y la situación se ha desmadrado. Según un reciente estudio, en el Estado se calcula que hay más de 19.000.000 de ratas. Principalmente de dos especies: la rata gris o de alcantarilla (Rattus norvegicus) y la negra (Rattus rattus). Sobre esta última hay que decir que desde Anecpla ya han alertado de su alto incremento en los últimos meses.

La plaga de ratas vector de trasmisión de enfermedades

Por suerte, en Europa las redes de saneamiento y el no contacto con este roedor han minimizado la presencia de las enfermedades transmitidas por ellos. Pero en otras zonas como África la situación difiere ostensiblemente. Según una información aparecida en el suplemento del diario ABC, XL Semanal, la Organización Mundial de la Salud, estima que este animal es responsable de más de 400 infecciones humanas al año, provocadas por las mordeduras, sus parásitos y sus orines.

Eso sí, no hay que olvidar que hace unos años científicos de las universidades estadounidenses de Cornell y Columbia hallaron datos preocupantes a la hora de analizar la presencia de piojos, pulgas y ácaros en ratas recogidas en Nueva York. Este estudio también encontró 18 virus nuevos, desconocidos hasta la fecha.

Tal es la repercusión de este dato que XL Semanal recoge la opinión de uno de los expertos en esta especie; Steven Belmain. El profesor se muestra preocupado por este dato y junto con otros expertos está inmerso en un proyecto cuyo fin es erradicar a poblaciones enteras. Su iniciativa se está probando en países como Tanzania y Madagascar. Belmail y su equipo se están centrando en la rata negra, causante de la peste en Europa durante la Edad Media y esperan lograr excelentes resultados. Junto a este estudio países como China y Tanzania están realizando ensayos con el objetivo de utilizar hormonas para reducir la reproducción de este animal.

Sea como fuere, el miedo a recordar lo sucedido con la peste negra en el siglo XIV, está haciendo que se apueste por la reducción de la presencia de ratas en ambientes urbanos. Las empresas de control de plagas así como las administraciones públicas deben prestar atención a este tipo de situación. El coronavirus ha sido uno de los culpables de la expansión de este roedor por lo que ahora no se puede bajar la guardia y se debe confiar en unas labores de desratización eficaces y efectivas.