Los pinos de parques y jardines de algunas regiones de la Península ya están sufriendo la presencia de la procesionaria. El invierno tan suave que estamos viviendo ha hecho que la plaga se adelante un mes en alguna zonas. Esto hace preguntarnos cuándo veremos la plaga de la oruga procesionaria en Bilbao De momento, las empresas de control de plagas no tenemos consciencia de su aparición pero tarde o temprano llegará.
Lugares como Ceuta, algunas provincias de Andalucía o el Levante ya han detectado la presencia de este insecto que puede ser dañino para personas o animales.
De hecho según informó Anecpla, en Ceuta una pareja de hermanas de 5 y 10 años tuvieron que ser atendidas en urgencias el pasado mes de febrero, al haber entrado en contacto con la oruga procesionaria. Un leve roce con esta especie puede acarrear dermatitis, lesiones oculares, urticaria y fuertes reacciones alérgicas, por lo que se recomienda no interactuar con ella.
Estos datos no hacen más que confirmar lo que venimos presuponiendo las empresas de control de plagas en Bilbao y Bizkaia que, una vez más, la presencia de esta plaga se ha vuelto a adelantar este año. Hecho confirmado por Milagros Fernández de Lezeta directora de Anecpla.
Fernández de Lezeta asegura que hemos sufrido un otoño e invierno con temperaturas suaves, escasas precipitaciones y esto hace que este insecto se propague antes de tiempo. Por eso, hace un llamamiento a tomar precauciones, sobre todo con niños y con animales domésticos para evitar reacciones alérgicas.
Un mínimo contacto de este insecto puede ocasionar desde dermatitis a lesiones oculares, pasando por urticarias y reacciones alérgicas, como hemos comentado anteriormente. Además, en algunos casos no es necesario ni estar en contacto con esta especie, ya que cuando se siente amenazada puede lanzar sus pelos al aire generando las mismas reacciones que al tocarlas.
Labores de control de plagas en Bilbao y Bizkaia
Desde Anecpla afirman que la mejor opción para evitar este problema es realizar unas buenas labores de prevención y “sistematizar los tratamientos de control”. Para ello, los mecanismos más utilizamos son: destrucción de bolsones, los tratamientos con insecticidas, el empleo de trampas de feromonas o la instalación de barreras físicas.
La elección de método de eliminación será designada por los técnicos tras valorar las condiciones ambientales, el nivel de infestación o el posible impacto que pueda tener en el ser humano o en otras especies de animales.
De esta manera, se recomienda que si detectamos su presencia, nos pongamos en contacto con una empresa de control de plagas. Ellos sabrán los pasos a dar para eliminar esta molestia y evitar que nuestras mascotas o los más pequeños de la casa sufran reacciones alérgicas.