Todos sabemos que el cambio climático es un hecho. Anualmente vemos en los informativos que la temperatura del planeta va subiendo poco a poco con motivo de los gases de efecto invernadero. Los países están intentando que la temperatura de la Tierra no suba para evitar efectos en la población y en la economía mundial. Pues ahora, un grupo de científicos en EE.UU ha alertado de que con el calentamiento global, las cosechas de trigo, maíz y arroz se verán reducidas por el aumento de plagas de insectos.
En el artículo publicado por Science aseguran que la pérdida de cultivos en las regiones templadas del planeta como Bizkaia, por las plagas de insectos, aumentará entre un 10% y un 25% por cada grado centígrado que suba la temperatura.
El motivo de este crecimiento apunta al incremento del metabolismo de los insectos por efecto de la temperatura. Cuantos más grados centígrados haya, los insectos se mostrarán más hambrientos y serán más numerosos. Además, al hacer más calor en el planeta, las plagas disminuirán en las zonas tropicales del mismo pero en lugares templados, al subir la temperatura, los ecosistemas su vuelven favorables para este tipo de animal.
Estos datos han sido medidos mediante la combinación de factores como: la combinación de datos de proyección climática, estadísticas de rendimiento de cultivos, tasas metabólicas de insectos y la información demográfica.
Bizkaia, uno de los lugares afectados por las plagas
En cuanto a nuestra zona, en España y por consiguiente en Bizkaia, según palabras al diario El Mundo de Curtis Deutsch, uno de los investigadores. “En el Estado, la pérdida de los cultivos debido al impacto de los insectos sería de un 10,5% en las cosechas de maíz y arroz y un 7,5% de las de trigo, aumentando en alrededor de un 50%, los datos que se dan actualmente. Hoy en día se pierde cerca del 5% del trigo y un 7% del maíz y el arroz por culpa de las plagas.
Si extrapolamos estos datos a los mayores productores de maíz, trigo y arroz en latitudes como la vizcaína. Países como Estados Unidos, China o Francia serían los más afectados por la plaga de insectos. En concreto, se calcula que la pérdida de este tipo de alimento rondaría los 213 millones de toneladas.
Con estos datos, desde las empresas de control de plagas no nos queda más remedio que concienciarnos con el medio ambiente y realizar unos tratamientos lo menos perjudiciales posibles para el planeta.