Se va acercando el verano época de vacaciones, estar más tiempo al aire libre, en terrazas etc. Pero nada es perfecto y también es tiempo de picaduras de mosquitos, avispas, abejas… Si somos proclives a ser víctimas de estas especies durante la época estival, te enseñamos a cómo identificar qué tipo de insecto te ha picado. Eso sí, si ves que la situación se agrava y que su número no es normal, igual tienes que ponerte en contacto con una empresa de control de plagas para realizar unas labores de desinsectación.
Según Anecpla, este año se calcula que la presencia de insectos comience antes de lo previsto por las altas temperaturas que estamos padeciendo en estas últimas semanas.
El incremento de los termómetros y el calentamiento global están detrás de que cada vez notemos antes la presencia de mosquitos, cucarachas o ratas. Antes, los ciclos biológicos de estas especies empezaban en mayo o junio, ahora se pueden reproducir durante más tiempo por lo que tenemos más posibilidades de padecer una plaga. De todas formas, adelantando los trabajos preventivos, así como la fumigación de insectos se evitará incrementar esta incidencia que todos los años por estas fechas es noticia.
Tipos de picaduras de insectos
En primer lugar, las picaduras de mosquitos son las más habituales y con las que estamos más familiarizados. Suelen presentarse aisladas las unas de las otras. Su tonalidad es rojiza y notamos un picor que en un corto periodo de tiempo se pasa. De todas formas, aunque es raro que parezca, en algunos casos los mosquitos son vectores de enfermedades como el virus del Nilo Occidental o el Zika. Por eso si, tras su picadura, notamos dolor de cabeza o los síntomas de un resfriado, mejor acudir a nuestro médico.
Tras los mosquitos, las avispa y abejas son las segundas clasificadas en esta general de los insectos que más nos pican. Ambas presentan las mismas consecuencias: enrojecimiento, hinchazón, dolor y ardor que pasará al de unas horas. Para diferenciar qué especie te ha picado, nos tenemos que fijar si en la picadura han dejado el aguijón. Si lo vemos, será una abeja quien nos haya picado, si no localizamos nada, será una avispa. Si ha sido una abeja, debemos quitar con cuidado el aguijón.
Por norma general, las picaduras de estos insectos no traen mayores síntomas de los citados anteriormente. Eso sí, si somos alérgicos a su picadura o notamos que nos cuesta respirar, lo más indicado es acudir al centro de salud más cercano.
Tampoco podemos olvidar a las pulgas como uno de los invitados no deseados a este tipo de escenarios. Para saber si somos víctimas de esta especie, su picadura suele crear tres o cuatro protuberancias rojas y sus efectos son similares a las de mosquito. De hecho su diferencia radica en el tamaño y el número de las mismas.
Por último, nos centramos en uno de los insectos que más ha incrementado su presencia en los últimos años: las garrapatas. Según un estudio del Centro Nacional de Epidemiología, en los últimos 15 años los ingresos por su picadura se han multiplicado por tres. Su mordedura es de un color rojo intenso que suelen ir acompañados de ardor o picor. Normalmente sus picaduras se suelen dar en zonas como inglés, axilas o cabello. Las garrapatas se quedan pegadas a nuestra piel por lo que se debe retirar con una pinza y con mucho cuidado.
Ahora que ya estás pensando en las vacaciones, la sombrilla o la bicicleta, es bueno que distingas las picaduras de los insectos más frecuentes para saber cómo reaccionar. Mientras llega ese día, las empresas de control de plagas nos esmeramos en atender cualquier solicitud o resolver cualquier duda que haya sobre la presencia de insectos, roedores etc.